El tofu está hecho de leche de soja, que se obtiene exprimiendo el zumo de los granos de soja y cuajándolo con nigari, un agente coagulante. A los japoneses les encanta la refrescante e intensa fragancia de la soja y la textura suave de la cuajada. Hoy en día el tofu está en boga por ser un alimento saludable, ya que está repleto de nutrientes como proteínas, vitaminas y minerales y lejos quedó aquello de «pero si no sabe a nada!».
Para muestra, esta receta. El yudofu o yudoufu (湯豆腐) es un guiso en el que el tofu se calienta en agua hirviendo con algas marinas. Se come mojándolo en un caldo a base de salsa de soja y unos cuantos condimentos. Al ser un plato tan sencillo, se aprecia por completo el sabor del tofu. Según la región y el restaurante, se utilizan distintas salsas y condimentos. Por ejemplo, algunos usan ponzu (salsa de soja mezclada con zumo de cítricos) para mojar, y otros usan condimentos tan variados como cebollas verdes, copos de bonito o rábano daikon rallado.
Comenzó como un plato vegetariano para los monjes Zen que entrenaban siguiendo los preceptos budistas. En lugares como los templos Zen que hay alrededor del Templo Nanzen-ji Zen, en Kioto, todavía existen muchos restaurantes donde se puede disfrutar del yudofu mientras se contemplan los jardines. Como Kioto ha sido bendecida con un agua de gran calidad, los residentes llevan mucho tiempo disfrutando de la cocina del tofu en armonía con la cultura budista que se ha desarrollado en la localidad. A diferencia de Edo (antiguo nombre de Tokio), donde hay una gran variedad de mariscos como fuente de proteínas, Kioto está rodeada de montañas. Puede que sea otro de los motivos por los que el tofu es tan apreciado en dicha ciudad.
El Kaiseki es un plato de comida japonesa que tiene como fin entretener a los invitados y disfrutar del té. El Yudofu Kaiseki es una comida que se sirve durante la ceremonia del té, en la que el yudofu ocupa un lugar central junto con varios platos de tofu, como el tofu dengaku con pasta de miso dulce.
Pero no solo se disfruta del yodofu en estos ambientes tan aplacibles. En todo Japón es muy común acabar tu jornada laboral tomando unas cuantas cervezas con los compañeros de trabajo, y en las noches de verano, no puede faltar este acompañamiento tan ligero y refrescante.
| Región: Asia – Japón Servicios: 1 Dificultad: Baja Tiempo: 15 minutos |
Ingredientes principales
- Tofu blando
- Jengibre
Ingredientes para las salsas
Acompañamiento tradicional (negishio)
- Puerro
- Aceite de sésamo
- Pimienta
- Sal
- Soja (opcional)
Acompañamiento de puerro frito
- Puerro
- Aceite de girasol
Acompañamiento de cebolleta
- Cebolleta
- Jengibre
- Soja
- Lima
- Agua
Preparación
Corta el tofu en cubos de unos 4 centímetros y el jengibre en rodajas.
Introduce ambos ingredientes en una sopera o cuenco de barro, añade suficiente agua como para cubrir todo el tofu y cocina a fuego medio-bajo durante 10 minutos.
Cuando el tofu se tambalea en el agua caliente, significa que está listo para comerse.
Mientras se cocina el tofu, prepara las salsas. Puedes preparar estas 3 al mismo tiempo o hacer sólo la que más te guste:
Salsa Negishio:
Corta el puerro en rodajas, quita las dos capas más superficiales y pica.
Mezcla con aceite de sésamo, unas gotitas de salsa de soja (al gusto) pimienta negra y sal. Mezcla todo y añádeselo al tofu por encima.
Salsa de puerro frito:
Corta el puerro en rodajas, quita las dos capas más superficiales y pica.
Salea en una sartén con aceite vegetal.
Añádeselo al tofu por encima y sirve.
Salsa de cebolleta:
Corta el rodajas de unos 2 cm de largo, quita las dos capas más superficiales, abre por la mitad, retira la parte más central y verde y pica en tiras muy finas.
Corta la parte verde de la cebolleta en rodajas finas.
Mezcla la salsa de soja con le zumo de lima y rebaja con un poco de agua. La cantidad de lima dependerá de lo ácido que que guste.
Sirve los bloques de tofu, añade la salda y decora con el puerro, la cebolleta verde y el jengibre por encima y sin mezclar.


